lunes, 31 de octubre de 2011

Mi ventana

Hay algo que debo sacarme de adentro. Algo que lleva días, meses, cultivándose dentro de mi.

Dicen, que llevamos nuestra vida como vaya pasando, hasta que un buen día, decidimos por primera vez, vivirla.
Exactamente eso me pasó. Un buen día, tuve una epifanía. Quería ver el mundo, pero mi ventana solo da hacia la calle.
Cuando vivía en caracas, podía ver la ciudad desde la ventana de mi compañera, pero desde la mía sólo daba hacia una pared.

Esa amiga, la cual me llena de orgullo llamarla mi amiga, se va de Venezuela para un internado de medicina.

Ella vio caracas, y supo que había un mundo más grande allá afuera. Asi que necesita un sitio mas alto para apreciarlo. Yo tuve esa ventana, y no la supe aprovechar. Yo sólo conseguia ver un muro.

Hoy, necesito una ventana que me permita mirar al mundo.
He emprendido esa búsqueda. Sin embargo, a veces lamento haber desperdiciado mi tiempo sintiendo pesadez y no el ímpetu. El primer día de mi vida, ya pasó. Apenas empiezo a vivir. Disculpen si mis líneas ya no son tan continuas, pero estoy buscando mi ventana.

Hay mucho terreno por explorar, y ese terreno espera ser conquistado por mi.

jueves, 20 de octubre de 2011

Cortas líneas

Nuestros recuerdos felices me parecen tan lejanos ya.

Adopto mi mejor cara de poker para no demostrarte el daño que me hace tu indiferencia.

Tal vez a ti poco te importa mi ausencia de igual forma.

Me gustaría mucho que pudieras interesarte un poco más, o por lo menos, que yo pueda quererte menos.

miércoles, 5 de octubre de 2011

Te detesto

Te detesto. Si chico, resulta que te detesto!
Detesto tus cabellos entre mis manos, detesto que muerdas mi labio inferior y me tiemblen las piernas!
Detesto sentir pánico al verte por no saber como responderá mi cuerpo ante tu presencia!
Detesto que tu recuerdo me queme por dentro, que me den escalofríos al sentir tu respiración tan cerca, como si fuera un pecado capital desearte tanto.
Detesto que tengas esta influencia en mi.
Pero sobre todas las cosas...detesto profundamente, que no tengas mas nada que ofrecer salvo esto: deseo, pasión, locura, risas y sexo con algo parecido al amor.